DANA Valencia
Guía de reparaciones en inmuebles afectados
El pasado 29 de octubre, una intensa DANA azotó con fuerza las comarcas de L’Horta Sud y la Ribera de Valencia, dejando tras de sí una estela de graves destrozos en municipios como Alzira, Cullera, Algemesí, Picanya, Paiporta, Aldaia, Massanasa, Alfafar, Sedaví y Torrent. Los garajes y trasteros, a menudo ubicados en plantas bajas o sótanos, sufrieron especialmente los embates de las inundaciones y la acumulación de lodos, generando importantes perjuicios para propietarios y comunidades de vecinos.
Conscientes de esta situación y con el objetivo de ofrecer una ayuda práctica y eficaz, desde Myrmex hemos elaborado una guía detallada para facilitar la identificación y reparación de los desperfectos ocasionados por este fenómeno meteorológico adverso. Esta guía se presenta como una herramienta fundamental para afrontar las tareas de recuperación, ofreciendo pautas claras y recomendaciones específicas para devolver la funcionalidad y seguridad a estos espacios comunes y privados.
Aseguradoras y el Consorcio de Compensación de Seguros:
una pieza clave para la recuperación
La devastadora DANA que recientemente azotó nuestra región ha dejado una huella significativa, especialmente en los garajes y trasteros de numerosas comunidades de propietarios. Ante esta situación, la correcta gestión de las reclamaciones se erige como un paso fundamental para la recuperación. Es crucial que las comunidades afectadas dirijan sus reclamaciones tanto a sus compañías aseguradoras como al Consorcio de Compensación de Seguros. Este último desempeña un papel esencial, ya que puede cubrir total o parcialmente los gastos necesarios para devolver estos espacios a su estado original, siempre y cuando se presente la documentación pertinente de manera adecuada.
La clave para una reclamación exitosa reside en la preparación de una documentación exhaustiva y precisa. Esta debe incluir:
Informes técnicos detallados, elaborados por profesionales cualificados que evalúen la magnitud de los daños.
Fotografías claras y representativas, que evidencien de forma inequívoca los desperfectos ocasionados por la DANA.
Presupuestos pormenorizados para cada una de las reparaciones necesarias, especificando los costes de materiales y mano de obra.
En Myrmex, comprendemos la complejidad de estos trámites y queremos facilitarte el proceso. Por ello, te ofrecemos nuestra experiencia para la elaboración de presupuestos adaptados específicamente a los requisitos de las aseguradoras y del Consorcio de Compensación de Seguros. Nuestro objetivo es simplificar la gestión de tus reclamaciones, agilizando el proceso de compensación para que puedas recuperar tu propiedad en el menor tiempo posible y con las mayores garantías.
Pide presupuesto sin compromiso
Enfrentar los daños ocasionados por la reciente DANA puede ser un desafío, pero no tienes que hacerlo solo. En Myrmex, ponemos a tu disposición nuestra amplia experiencia para gestionar integralmente cualquier reparación que tu propiedad haya sufrido.
Desde las tareas iniciales de limpieza y retirada de lodos hasta las reparaciones estructurales más complejas, nuestro equipo de profesionales está preparado para ofrecerte soluciones eficaces y duraderas. Entendemos la urgencia de recuperar la normalidad, por lo que nos comprometemos a proporcionarte un presupuesto rápido y completamente adaptado a tus necesidades específicas. Confía en Myrmex para devolver la funcionalidad y seguridad a tus espacios afectados.
Procedimiento de limpieza y reparación de fincas, garajes y trasteros
Tras las devastadoras inundaciones y la acumulación de lodos provocadas por la reciente DANA en diversos municipios de la provincia de Valencia, la restauración de la funcionalidad y seguridad de los garajes y trasteros afectados se convierte en una prioridad. Fruto de las numerosas visitas y evaluaciones que Myrmex ha realizado a propiedades damnificadas, hemos elaborado el siguiente listado exhaustivo de las principales tareas y revisiones que deben llevarse a cabo para asegurar una recuperación completa de estos espacios. Este listado busca ofrecer una guía práctica para propietarios y comunidades de vecinos, garantizando que, tras las labores de reparación, los garajes y trasteros vuelvan a ser espacios seguros y plenamente funcionales.
1. Retirada de lodo y evacuación del agua acumulada
El primer paso, y el más fundamental, es la limpieza profunda del garaje o trastero. Esto implica la retirada exhaustiva de lodos y agua acumulada. Dependiendo de la magnitud de la inundación y el funcionamiento de los sistemas de drenaje propios del garaje, esta tarea puede requerir el uso de bombas de achique o equipos mecánicos especializados. En situaciones donde los sistemas internos estén inoperativos, será necesario realizar una limpieza manual, asegurando que toda la zona quede completamente libre de residuos antes de proceder con cualquier otra reparación.
2. Inspección de desagües
Una vez despejado el espacio, es vital llevar a cabo una revisión exhaustiva de los sistemas de bajantes y desagüe. Las inundaciones a menudo provocan roturas en codos, tramos horizontales y verticales, lo que puede permitir el retorno de aguas residuales al garaje, empeorando los daños y obstaculizando las reparaciones. Identificar y reparar estas fugas es crucial para prevenir problemas futuros.
3. Revisión de la estructura
Tras una inundación, es crucial evaluar exhaustivamente los elementos estructurales (forjados, pilares, tabiques) y las particiones internas (trasteros, rampas) del garaje por técnicos cualificados para detectar daños (fisuras, desplazamientos, pérdida de integridad) causados por la sobrecarga de agua y lodo. Se deben buscar hundimientos, inclinaciones o deformaciones, incluso después del secado. Es recomendable elaborar informes técnicos detallados para planificar reparaciones y para reclamaciones a aseguradoras. Esta evaluación y reparación son fundamentales para la seguridad de los usuarios, la estabilidad del garaje y su vida útil.
4. Revisión de la instalación eléctrica
Después de una inundación, la inspección detallada de las instalaciones eléctricas en garajes y trasteros es esencial por seguridad. Se debe secar completamente todo componente eléctrico antes de repararlo para evitar cortocircuitos o electrocuciones. Profesionales cualificados deben evaluar luminarias y cuadros eléctricos, pudiendo inhabilitarlos temporalmente hasta certificar su seguridad. El agua acumulada en las pantallas de las luminarias debe retirarse con cuidado. A menudo, las luminarias pueden reutilizarse desmontando y secando sus partes internas y sustituyendo la lámpara o tubo dañado, lo que permite una reparación eficiente y económica.
5. Prueba de funcionamiento a la bomba de achique
Tras una inundación, la revisión exhaustiva de la bomba de achique, un elemento crucial generalmente ubicado en la planta más baja del garaje, se torna fundamental. Para evaluar su correcto funcionamiento después del evento, es necesario retirar cuidadosamente cualquier acumulación de lodos que pueda obstruir su mecanismo. Posteriormente, rellenar el foso con agua limpia permitirá verificar si el equipo se activa y bombea el agua de manera eficiente. Es importante destacar que las mangueras pertenecientes a los sistemas antiincendios del garaje pueden ser de gran utilidad para llevar a cabo estas tareas de limpieza y prueba de la bomba de achique. Asegurar la operatividad de este sistema es vital para prevenir futuras acumulaciones de agua y garantizar la seguridad del espacio.
6. Limpieza con agua a presión
Una vez que el garaje o trastero ha sido liberado de agua y de la mayor parte del lodo, el siguiente paso crucial es la limpieza profunda de todas las superficies utilizando hidrolimpiadoras. La aplicación de agua a presión sobre paredes, techos y suelos resulta esencial para eliminar los restos de lodo incrustado. Para prevenir la proliferación de problemas bacteriológicos y el crecimiento de moho, favorecidos por la presencia de materia orgánica tras la inundación, se recomienda encarecidamente el uso de productos desinfectantes durante esta fase de limpieza. Es importante recordar que estas tareas deben llevarse a cabo únicamente cuando el espacio esté completamente despejado de vehículos y cualquier otro tipo de residuo, garantizando así una limpieza eficaz y segura.
7. Reparación de superficies
Tras una inundación, es imprescindible reparar o sustituir los revestimientos (con desprendimientos, grietas o deterioro) y los tabiques dañados por agua y lodo. A menudo se requiere retirar los revestimientos hasta encontrar superficies secas y estables para aplicar nuevos materiales impermeabilizantes o pinturas resistentes a la humedad. Los tabiques inestables deben demolerse y reconstruirse con materiales duraderos. Se aconseja un tratamiento preventivo en las superficies afectadas, como la aplicación de fungicidas y revestimientos especiales antihumedad, para preservar a largo plazo garajes y trasteros.
8. Secado y pintado de superficies
Tras secar completamente las superficies (acelerando el proceso con cañones de calor si es necesario), es crucial aplicar pinturas específicas resistentes a la humedad para proteger paredes, techos y suelos en garajes y trasteros. En garajes, se recomienda marcar horizontalmente las plazas con pintura epoxi para organizar el espacio, facilitar el mantenimiento y resistir el desgaste vehicular. También es habitual aplicar un zócalo gris y blanco para disimular manchas y facilitar la limpieza. Este proceso de pintura restaura la estética y proporciona una protección duradera contra la humedad y el desgaste, prolongando la vida útil del espacio.
